sábado, 12 de septiembre de 2009

LA POLITICA Y SAN MAMES

Ya he manifestado en alguna ocasión, que cuando la política entra en algún lugar. Es cuestión de tiempo, pero ese lugar quedara podrido.
Todos sabemos en el momento delicado de crisis que nos encontramos, pero la construcción del nuevo campo de fútbol “San Mames” en Bilbao es diferente.
El Athletic no podía hacer frente al coste total de estas modernas instalaciones y formo la sociedad “San Mames Berria” formada por la Diputación Vizcaína, la caja de ahorros BBK, el Ayuntamiento Bilbaíno, el Athletic y faltaba la pata del Gobierno Vasco.
Desde que esta semana el ayuntamiento ha dado vía libre al proyecto de construcción y la pólvora política ha empezado ha quemarse.
El PP lanzo un órdago al PSOE (socios en el Gobierno Vasco), estos salieron ayer a los micrófonos (tarde y mal). Uno decía que si no había más remedio, otro que estaba convencido que el Gobierno Vasco entraría en el proyecto y la desaconsejada Vice-Lehendakari decía “tendrá (PP) que explicar a los alaveses y guipuzcoanos”.
La “Vice” no esta nada puesta, el Gobierno Vasco (era PNV) puso bastante “pasta” para el Campo Municipal Mendizorroza –Vitoria- que es de la ciudad y lo utiliza en exclusiva una empresa privada llamada Deportivo Alavés y tres cuartos de lo mismo pasa en la ciudad de la bella easo Donosita-San Sebastián.
Ellos construyeron un estadio, pagado por alaveses y vizcaínos para que lo disfruten en exclusiva una sociedad anónima llamada Real Sociedad de San Sebastián S.A.
Por lo cual, lo lógico es que un club deportivo como es el Athletic Club pediría con más razón lo mismo para Bilbao.
Más teniendo en cuenta que con su construcción y su capacidad (53.000), el estadio bilbaíno entraría de lleno a formar parte de los campos europeos que optan ha obtener premios como finales de competiciones europeas, o participación de la posibilidad de sede de próximas mundiales.
Con todo lo que esto conllevaría (gastos en hoteles, restaurantes, tiendas de Euzkadi, Álava, Guipúzcoa, Bizkaia y por supuesto Bilbao).
Creo que al Gobierno Vasco se le avecina un problema, parecido al que años atrás tuvo con una pequeña gran obra llamada entonces Museo Gughengeim. Pocos o ninguno confiábamos entonces en aquel edificio de titanio, pero hoy estamos arrodillados por todos los efectos que ha tenido para “el botxo”.
En resumidas cuentas, señores políticos toca acoquinar poniendo una pasta, que sitien ahora no sabemos de donde sacar, luego tampoco sabremos donde meterla (bueno ustedes, que yo si sabría. Un chalelicito, un barco, un viaje…….).


No hay comentarios:

Publicar un comentario